Prepárate para sorprender tus sentidos con una combinación irresistible de sabores y texturas, que se fusionan a la perfección con el hielo edenox, garantizándote una experiencia única y llena de frescura.

Desde clásicos reinventados hasta creaciones originales, hemos reunido para ti una variedad de 5 cócteles que te transportarán a un paraíso de sabores tropicales y revitalizantes. ¡Embárcate en este viaje de deleite y descubre tus nuevos favoritos veraniegos!

Cócteles

Piña Colada

Tropical y exótico, este pilar de los cócteles de ron fue inventado el Caribe Hilton de San Juan (Puerto Rico). Ramón «Monchito» Marrer fue el primero en servirlo en 1954. En este entonces se creaba el cóctel en una coctelera ya que no existían las licuadoras. Además, ¡era un cóctel virgen! Sin alcohol.

Hoy en día el hotel lo prepara con ron ligero Bacardí. Unos 20 años más tarde se declaró el cóctel como la bebida oficial de Puerto Rico.

Ingredientes:

60 ml de ron ligero, 345 ml de crema de coco, 345 ml de zumo de piña, 15 ml de zumo de limón verde fresco

Guarnición: hoja de piña y un cuarto trozo de piña.

Elaboración:

Agrega los ingredientes en una coctelera con hielo y agita vigorosamente durante 20-30 segundos. Filtra en un vaso tipo Hurricane o cualquier vaso largo estilo Tiki sobre hielo. Decora con la hoja y la rodaja de piña.

Negroni

Un legendario cóctel de aperitivo. Cuenta la historia de que el conde Camillo Negroni pidió al barman del Caffè Casoni en Florencia que cambiara la soda por ginebra en su cóctel favorito, el Americano. Así nació uno de los cócteles más famosos y versátiles de todos los tiempos.

Ingredientes:

300 ml de Campari, 300 ml de vermú rojo, 300 ml de ginebra, naranja.

Elaboración:

El Negroni se sirve bañado en hielo, preferiblemente en vaso bajo y ancho y con una cáscara de naranja. Aunque veáis en algunos sitios hacerlo con coctelera, es un cóctel que, tradicionalmente, se mezcla directamente en vaso. Para armarlo solo debemos llenar el vaso de hielo edenox y, con ayuda de un jigger, verter una parte de Campari, una de vermú rojo y una de ginebra, de 30 cl cada una. Se remueve bien con una cuchara y se termina con un twist de naranja.

Caipirinha

La caipirinha es un delicioso refresco que nos transporta a las exuberantes tierras de Brasil. Su sencillez en la preparación y su perfecta adaptación al verano la predeterminada en una opción irresistible. No obstante, es importante prestar atención a algunos detalles para disfrutar de una auténtica caipirinha.

En primer lugar, debemos utilizar cachaça, un destilado elaborado a partir del jugo de caña de azúcar, característico de Brasil. Similar al ron, posee notas amargas que lo distinguen y se equilibran a la perfección con el azúcar y el toque cítrico de la lima. Sin cachaza, no podemos obtener una verdadera caipirinha. Por lo tanto, es imprescindible adquirir una cachaza de calidad.

Ingredientes:

60 cl de cachaza blanca, una lima partida en cuartos, una cucharadita de azúcar, cubitos de hielo macizo edenox, rodajita de lima.

Elaboración:

Este combinado se realiza directamente en el vaso, que en principio debe ser de tipo Old Fashioned (bajo y ancho), aunque también se puede beber en un trago más largo. Se tiene que cortar la lima en cuartos, realizando el corte longitudinalmente para poder extraer la parte blanca central, que es amarga. Se utilizan los cuartos de lima incluyendo la corteza.

Posteriormente se maja la lima con un mortero (o muddler) junto con el azúcar. Opcionalmente se puede añadir más zumo de lima o limón. Se echa la cachaza al gusto, puede ser más de 60 cl, o menos si la queremos más flojita. Y por último un detalle muy importante: se tiene que rellenar la copa de abundante hielo, para que se enfríe bien la mezcla. Importante: se debe beber con unas pajitas desde la parte inferior del vaso. Si bebemos directamente de arriba, estaremos bebiendo solo cachaza. La gracia está en la combinación bien fría que obtenemos desde el fondo al ir mezclándose las limas, el azúcar, la cachaza y el hielo.

Vesper Martini

El Vesper Martini aparece por primera vez en 1953 en la novela “Casino Royale” de Ian Fleming, está ligado al famoso personaje de ficción, James Bond. Este emblemático agente secreto, tanto en las novelas como en las películas, es conocido por su buen gusto y sofisticación. Una variación del Dry Martini, pero con dos bases alcohólicas: ginebra y vodka. Además, también lleva un vino aromatizado francés que le da un toque elegante y sofisticado. 

Si deseas adentrarte en el mundo de James Bond y experimentar la sensación de ser un auténtico agente secreto, aquí tienes la receta del cóctel Vesper:

Ingredientes:

45 ml. de ginebra, 15 ml. de vodka, 7,5 ml. de Lillet Blanc, 1twist de limón, hielo edenox para enfriar copa y coctelera.

Elaboración:

Para elaborar un Vesper debemos llenar las 2/3 partes de la coctelera con hielo, y agitar bien la mezcla antes de servirla. Se echa con un colador en una copa tipo Martini, que debe estar convenientemente fría. El Vesper Martini se presenta muy frío, pero sin hielo y con un twist de limón (a diferencia del Dry Martini que lleva una aceituna). Originalmente la ginebra era Gordon’s, pero podemos utilizar su ginebra favorita. El vodka mejor que sea de grano que de patata, al menos eso comenta James Bond en su novela al camarero. Ambos destilados tienen que ser de alta graduación (originalmente 50%). Y por último Lillet Blanc.

Gin & Tonic

El cóctel se originó en el siglo XVIII. Aunque se cree que fue creado por compañías coloniales, en realidad surgió como una forma de hacer más agradable el consumo del agua tónica utilizada contra la malaria. La combinación de ginebra, agua tónica y cáscaras de cítricos resultó en una bebida refrescante y popular entre los soldados y colonos británicos.

Hoy en día, el Gin & Tonic ha evolucionado y se ha convertido en una experiencia sensorial en sí misma. Las aguas tónicas han experimentado una amplia variedad de opciones en términos de calidad y sabores, desde las clásicas hasta las más exóticas, enriquecidas con ingredientes como hierbas, frutas y especias. Esta diversidad ha permitido un maravilloso maridaje con diferentes estilos de ginebra, creando combinaciones únicas que agradan a los paladares más exigentes.

Ingredientes:

50 ml de ginebra, 200 ml de tónica, 1 rodaja de lima o limón, Hielo.

Guarniciones: Tradicionalmente, se utiliza una rodaja o cáscara de limón. Dependiendo del Gin & Tonic se puede añadir naranja, pepino, bayas, etc. Recientemente, algunas personas han coloreado la ginebra de azul con flores de clitoria porque se vuelve rosa/púrpura cuando se añade la tónica.

Elaboración:

La copa: El Gin & Tonic se suele beber en vaso (trago largo o highball), aunque el globo es cada vez más importante

Dosis: Las dosis para hacer un Gin & Tonic varían, pero generalmente 1/3 de ginebra y 2/3 de tónica.

El gin tonic perfecto se hace directamente en el vaso, no en coctelera. Lo primero es elegir la copa o vaso donde lo serviremos. Elige una copa de balón o un vaso ancho, de tipo sidra.

Ponemos el hielo en la copa y si tienes una cuchara de coctelería, enfriamos la copa removiendo el hielo con la cuchara dando vueltas, siempre pegado al cristal de la copa. Si el hielo suelta algo de agua en el proceso, la vertemos fuera de la copa.

Parte una rodaja entera de lima o limón y ésta, a su vez, en dos medias lunas. Con una de ellas, frota suavemente el borde la copa y exprime unas gotas de su zumo en el interior. Coloca la otra media luna de lima en el interior de la copa.

Servimos la ginebra. La cantidad oscilará entre los 50 y los 60 mililitros, dependiendo de cada ginebra. Pero ni una gota más ni menos.

Incorporamos la tónica suavemente, directo desde su botellín o lata pegada a la copa sin romper la burbuja, es mejor con burbujas que sin ellas.

Por último, removemos con la cucharilla trenzada o con un palito de coctelería, da un cuarto de vuelta a la copa, para mezclar todos los ingredientes.

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